Pobreza, precariedad y gig economy (economía de recados)

Las reducidas tasas de rentabilidad empresarial, junto a las crisis cíclicas del capitalismo, han llevado al sector empresarial y a la mayoría de académicos, a defender y justificar las moderaciones salariales, la desregulación del mercado laboral (despido libre), reducciones de los costes laborales, y, últimamente, la denominada flexiseguridad.

Los minijobs en Alemania (contratos de una duración inferior a media jornada, con menos derechos laborales, y un salario máximo de 400-450 euros), los contratos de cero horas en Reino Unido (no hay un compromiso empresarial de contratación de unas horas mínimas, con lo que de hecho supone estar plenamente disponible, aunque sea para una hora de trabajo), así como la expansión de la economía de plataformas digitales como Uber, Deliveroo o Airbnb, que vende la idea de convertirte en un emprendedor abierto a un mundo lleno de oportunidades, pero sin ninguna obligación para la empresa. En definitiva, diferentes fórmulas para conseguir menores compromisos y costes para las empresas, y mayor inseguridad, precariedad salarial y desprotección para los/as trabajadores/as, llegando al fenómeno de los/as trabajadores/as pobres (working poors), que son un 13% de los trabajadores en Alemania .

Referencias