Ciencia bélica de los nazis

Al finalizar la Segunda Guerra Mundial, las potencias de los Aliados desarrollaron diversas operaciones con sus respectivos servicios de inteligencia, para secuestrar o reclutar a científicos que participaron en proyectos de investigación militar de los Nazis, en las llamadas «Armas Maravillosas del Tercer Reich», como cohetes, armas químicas y experimentación médica. En EEUU se denominó Operación Paperclip; en Reino Unido, Operación Backfire; y en la URSS, la Operación Osoaviakhim.

La Operación Paperclip involucró, hasta 1990, a 1.600 científicos/técnicos del régimen nazi , que aportaron conocimientos y técnicas para patentes y procesos industriales por un valor estimado de 10.000 millones de dólares .

La NASA y, por extensión, empresas como Space-X, se han basado en la tecnología extraída del régimen nazi. El primer vuelo exitoso de un cohete se produjo el 3 de octubre de 1942, y estaba coordinado por Wernher von Braun, que por aquel entonces ostentaba el empleo de Mayor en las Waffen SS y era el director técnico del programa de misiles nazi. Tras la guerra, von Braun se convertiría en el director del Marshall Space Flight Center de la NASA, desarrollando los cohetes Saturn V.

Referencias